2 de agosto de 2009

Hoy no hay copas




Hoy no puedo por menos que mostrar en la tortilla de patata una versión, cuanto menos inédita, del primer movimiento de la sonata Claro de luna de Beethoven, sin duda una de las páginas más oídas de la literatura pianística. De la mano de Pichard Cleidermal, el único pianista del planeta que hace playback cuando graba un documento audiovisual añadiendo baterías de la época de Los Panchos y regozándose a su antojo con la música de los grandes Maestros, manipulando el arte original como si éste le perteneciera de toda la vida... juzguen ustedes mismos.

¿Suena bonito? No lo sé, pero ¿qué pasaría si se nos ocurriese derramar kétchup en un cuadro de Van Gogh o dejar en pelotas a una Menina de Velázquez?




Menos mal que está aquí un clásico de este blog para solucionar esto y, agarrando la sartén por el mango, ¡pone los puntos sobre las íes!.
En el minuto 1’ 13’’ esta a punto de sufrir un esguince de meñique en la mano derecha pero, después de salvar el escollo, logra situar el punto culminante de la obra en el 4’ 05’’, no antes de haberse cerciorado varias veces de encontrarse solo en la sala para dar rienda suelta a su imaginación, sin límites.




Y como no me parece de recibo presentar una digna copa de Bohemia en este lamentable escenario, les dejo con el siguiente arreglo para piano y orquesta que, auque se ve que no es de Rimski Korsakov, está hecho con un poco más de gusto que lo anterior. Nos relata la bella historia acerca de esta composición. ¿Será cierta?

6 comentarios:

  1. bueno , empecemos por el Pichard , si te digo la verdad , las baterias me han sonado a midi de karaoke , jejeje...solo falta el organillo y la cabra :-P
    del segundo , mira , te lo diré claro , de piano no entiendo , pero eso de llevar el polo de rayas por dentro del pantalón y el pantalón subido hasta casi el sobaco..., es una horterada ( y yo no creo ke mire para cerciorarse de ke está solo , este está al loro que no se le acabe la bateria de la cámara , presumido...)
    y del tercero , no sé si la historia será cierta , en corazón corazón no han dicho nada al respecto...
    besos !!

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  2. Gracias Luís. Gracias por revelarnos en cada post, dónde están las agujas de los pajares.

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  3. Queda demostrado que, sin importar quien haga el intento, no se puede poner en pelotas a las meninas, no se puede tirar Kétchup sobre Van Gogh, ni arruinar la Sonata. Son cosas imposibles para la estupidez humana. Un gran abrazo.

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  4. Hay gente muy osada dispersa por el mundo, tanto que mejor estarían con las manos atadas a la espalda para que no pudieran cometer asesinatos con el arte.
    No sé si la historia es cierta, pero es bonita.
    Besotes grandes.

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  5. Me ha quitado usted toda la ilusión.
    Estábamos preparando una versión de los Nocturnos de Chopin con botella de anís, maracas, samples de King África y acompañamiento de la charanga de mi pueblo, para animar las próximas fiestas patronales. Pero después de su simpatía por el arte del tal Cleiderman, abandono el proyecto.

    Una cosilla sobre el segundo vídeo. Para mí que el hombre ese sabe y hasta lo mismo es bueno. Tal vez el problema sea que le han afinado mal el piano o que lo suyo es arte conceptual y no acabamos de pillarlo bien.

    Lo de la historia del tercer vídeo, pssssssssss... No sé no sé... Pa' mí que no. Ya le cuento en otra ocasión por qué.

    Un saludo.

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  6. Hola Luis.
    Muchas gracias por tu comentario
    la música me encanta.
    pasare por aquí mas seguido, para
    seguir leiendo tu blog.
    Saludos desde México, D.f.

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